Este ès un plato de la más pura tradición italiana. Presente en todas las cocinas regionales de Italia, ya que ès un plato pobre, de los campesinos de una vez, para llevar a la mesa y servir con un buen pedazo de pan, para ahogarlo dentro y llenar su panza.
El huevo era bastante fácil de encontrar, casi todo el mundo tenía un gallinero en la sociedad rural antigua, los tomates y las cebollas fueron los frutos de la tierra y el pan se hizo en casa, por las hábiles manos de las mujeres sostenedoras de las economías “delicadas”.
Mejor ahora o entonces? Boh? quién sabe… Ahora se desperdicia mucho, es cierto, però antes se hacìan muchos sacrificios…
En fin, nosotras Cuoche Clandestine (Cocineras Clandestinas), llegamos a ver este plato en la mesa cuando éramos niñas, por lo que una vez más lo vamos a presentar: Huevo con tomate. Si no o conoc’an, nos complace que puedan conocerlo!
Ingredientes para 2 personas
- 2 huevos
- 1 cebolla
- 400 g de tomates pelados
- tomillo
- aceite de oliva, sal y pimienta, lo que necesite
Dificultad: facil – Tiempo: 30 minutos
Picar finamente la cebolla y rehogar en una sartén con 4 cucharadas de aceite de oliva. Cuando esten doradas, añadir los tomates (si quieren pasarlos en el pasaverduras o simplemente aplastar con un tenedor, como lo hicimos nosotras), el tomillo, la sal y la pimienta. Cocinen hasta que se restrinja un poco, digamos durante unos veinte minutos.
Después de este tiempo, añadir los huevos en la superficie. Cubrir con una tapa y dejar que el blanco espese (posiblemente moverlo un poco con un tenedor, mezclando con la salsa de tomate). Cocine la yema a su gusto: el nuestra, como pueden ver, está bien cocido, però si les gusta la yema líquida y cremosa, se apaga el fuego tan pronto como los blancos se espesen. Et voilà, el plato está listo. Mamamia que bueno!
